viernes, 26 de abril de 2013

MINISTRO CASTILLA DICE QUE SE EVALUARÁ SI ES RENTABLE LA COMPRA DE LOS ACTIVOS DE REPSOL*

* Publicado en el diario El Comercio el viernes 26 de abril de 2013

Alvaro Gastañaduí Ramírez / José Santillán Arruz

El titular del Ministerio de Economía (MEF) aseguró que el Gobierno estaba haciendo un análisis técnico y exhaustivo para decidir la adquisición de los activos de Repsol y adelantó que no había que interpretarlo como un "regreso a políticas desechadas" sobre el rol empresarial del Estado.

En declaraciones a la prensa formuladas en el Foro Económico Mundial (WEF), enfatizó que aún no se había tomado ninguna decisión. Incluso, pidió no especular sobre ello, pues el Gobierno seguía apostando "por el crecimiento con inversión, pero con inversión privada".

Como para despejar cualquier duda, el presidente del Consejo de Ministros, Juan Jiménez Mayor, también señalo que el Perú estaba en una senda de inversión y no de estatismo. Trascendió que los demás ministros no verían con simpatía la posibilidad de que se efectué la adquisición.

Por su parte, la Primera Dama, Nadine Heredia, durante una visita a la provincia de Andahuaylas, dijo que el Gobierno no es responsable en el manejo de los recursos. "Quiero decirles que no haremos nada de manera improvisada, somos muy respetuosos de los recursos, aquí no vamos a mirar atrás ni repetir fórmulas que en su momento dejaron sufrimiento, tenemos programas y políticas públicas bien pensadas con sostenibilidad", enfatizó.

En tanto, el presidente del Congreso, Víctor Isla, aseguró que el Gobierno seguirá los mismos lineamientos de la hoja de ruta.

Cambio político - económico

Poco después de las declaraciones de Castilla, el economista Hernando de Soto consideró que esa adquisición podría significar un cambio en la orientación política y económica del Perú. Asimismo, demandó al Gobierno explicar las razones de ese interés, puesto que la tarea del Estado es brindar servicios al ciudadano y en ningún momento la concentración de mayor poder, mucho menos económico.

En ese mismo sentido, Pablo Secada, del Instituto Peruano de Economía, opinó que la posible adquisición de los activos de Repsol había generado incertidumbre entre los empresarios y "hará que retroceda su confianza en el país". Incluso, advirtió que podría hacer reducir el índice de crecimiento económico. Entre las variables que deberá analizar el Gobierno sobre la conveniencia de adquirir los activos de Repsol figura la rentabilidad de dicha operación.

Según algunos analistas y empresarios vinculados al negocio de hidrocarburos, la refinería La Pampilla no es rentable económicamente para el país, aunque sí las estaciones de servicio, que son consideradas como el "lomo fino" del negocio.

Para el consultor en temas de hidrocarburos, César Bedón, La Pampilla es un "muerto" en esa operación, pues solo produce las dos terceras partes de su capacidad y deben realizarse importantes inversiones para mejorar su productividad.

En ese mismo sentido, el ex presidente de Perúpetro Daniel Saba aseguró que ahora las refinerías para ser rentables deben procesar más de 300 mil barriles al día. La de La Pampilla produce actualmente 72,000 barriles diarios y su capacidad máxima es de 105 mil barriles.

Sin embargo, el investigador de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Jorge Manco Zaconetti aseguró que todo el negocio es rentable en su conjunto: refinería, grifos, red de comercialización, Solgas, etc.

Dijo que la refinería generaría sobre todo rentabilidad social, pues empezaría a producirse combustibles menos contaminantes en el país.

Manifestó que no había que temer a la inversión pública, pues Chile y Colombia lo habían hecho con éxito. Recordó que Ecopetrol, de Colombia, ya factura US$ 37 mil millones al año.

Además de ello, también debe analizarse las posibilidades financieras de la empresa Petroperú, que asumiría esa operación. La petrolera estatal logró S/. 66.2 millones de utilidades el 2012, lo que no alcanzaría para afrontar ni la modernización de la refinería de Talara ni mucho menos la compra de los activos de Repsol.

Quienes sí se asustaron con la posible adquisición de los activos de Repsol fueron los empresarios de los grifos. Uno de ellos, que prefirió no identificarse, aseguró que no estaban en condiciones de competir con el Estado.

Incluso, señalo que solo con el anuncio de que el Estado evaluaba adquirir los activos de Repsol ya se habían paralizado algunas inversiones. "Nadie puede competir con grifos del Estado y mucho menos en un mercado en el que el Gobierno podría controlar los precios", agregó.

jueves, 25 de abril de 2013

LA DERECHA PREMODERNA EN EL SECTOR DE HIDROCARBUROS


ESCRIBE: JORGE MANCO ZACONETTI (Investigador UNMSM)

Tengo el mayor de los respetos por la Dra. Lourdes Flores Nano lideresa del Partido Popular Cristiano (PPC), agrupación identificada tradicionalmente con los sectores empresariales, en particular los grupos de poder como el grupo Romero, Brescia, Graña y Montero entre otros y los sectores primario exportadores, agrupados en la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía, que tienen una posición contraria al fortalecimiento empresarial de la petrolera estatal PetroPerú. 

La lideresa del PPC mostró reflejos políticos en su última actuación en defensa de la institucionalidad y la democracia en el reciente proceso de revocatoria en la municipalidad de Lima, y generó la ilusión de una renovación ideológica de acuerdo a los tiempos, donde resulta una verdad irrefutable la crisis de la teoría y la praxis de las políticas de libre mercado, que han provocado en esencia el desplome del sistema financiero en el 2008 y la inestabilidad actual de la economía mundial.

La ilusión que generó su participación política le ha permitido posicionarse favorablemente en las próximas elecciones presidenciales si logra la confluencia de los amplios sectores medios y populares que votaron contra la revocatoria de la alcaldesa de Lima Susana Villarán y los regidores de diversos partidos de un amplio espectro de la izquierda.

Se debiera reconocer la oportunidad y el liderazgo demostrado incluso contra la opinión de la mayoría de los dirigentes de su partido, para revertir en las encuestas y en el proceso electoral mismo lo que parecía ser una derrota cantada. 

Es decir, tuvo una participación política fundamental en la lucha por la democracia y la institucionalidad acrecentando un reconocido prestigio y capital político que se desfigura con una posición contraria al fortalecimiento de la petrolera estatal como lo hacen entre muchos países, los gobiernos liberales de Colombia con Ecopetrol, el tigre asiático de Corea del Sur del Sur con KNOC o nuestro vecino del sur con ENAP de Chile, a los cuales no se les puede acusar de dinosaurios ni de hacer políticas idiotas en materia de hidrocarburos.

Sin embargo, esa valiente apuesta,  cuando las encuestas favorecían a los cuestionados revocadores, en defensa de la institucionalidad en el municipio capitalino me hizo pensar que para suerte del país, podría existir una confluencia entre una derecha liberal moderna y una izquierda remozada, alejadas ambas de los fundamentalismos ideológicos y económicos, que conjugue las fuerzas del mercado con la intervención del Estado en sectores sensibles y estratégicos como los hidrocarburos.

Resulta curioso que la lideresa del PPC habiendo sido identificada injustamente como la “candidata de los ricos” en las elecciones del 2006 coincida con el ex presidente Alan García en el negado fortalecimiento de la petrolera estatal, en especial por el interés por parte del Estado en la adquisición del 51.3% de las acciones de Repsol en la refinería La Pampilla, las estaciones de servicios (grifos) y la planta de envasado de las gas licuado de petróleo. 

Es más, como severa experta llevada por un extremismo ideológico afirma que “es una idiotez comprar acciones de La Pampilla”. Y agrega “Qué se pretende ¿Qué volvamos al PetroPerú deficitario de los ochenta y parte de los noventa o al chavismo ramplón” Diario Gestión 22/04/13

En principio, como futura estadista debiera informarse mejor que importantes empresas estatales petroleras de terceros países operan exitosamente en el Perú. La lista es larga en América Latina y en el mundo, solamente en la región países como Chile y Colombia con regímenes políticos abiertos al mercado, con políticas de apertura y desregulación tienen una importante presencia en el sector de hidrocarburos de nuestro país.

Ecopetrol S.A. de Colombia es una empresa petrolera estatal que opera de manera integrada  con una producción de crudo superior a los 323 mil barriles diarios, con ingresos por ventas de petróleo y gas superiores a los 35,577 millones de dólares en el 2011 y utilidades netas es decir residuales descontados todos los costos de 8,360 millones de dólares

Es decir, la petrolera estatal colombiana en un solo año ha generado ingresos superiores a los obtenidos por el sector minero del Perú que está bajo control de las empresas privadas sobre todo transnacionales que en el 2011 significaron ingresos por exportación por 27,364 millones de dólares. Es más, si se sumarán los ingresos obtenidos en dicho año por las empresas PetroPerú (US$ 4,929 millones) y Refinería La Pampilla (US$ 3,955 millones), Ecopetrol largamente las supera por la participación integrada de sus operaciones.

En el mismo sentido, en nuestro país también opera la empresa estatal de chilena ENAP asociada al grupo Romero (51%) en la principal cadena de distribución de combustibles Primax, con una participación del 49% , también tiene presencia por medio de la empresa Manu Perú Holding de combustibles responsable de la exportación e importación de los derivados del petróleo.

En su país ENAP opera eficientemente las  refinerías que fueron modernizadas hacia inicios de la década pasada, ampliando su capacidad de refino y sobre todo procesando el diesel 2 con 50 partes por millón de azufre como parte de una estrategia nacional para regular la entrada de combustibles provenientes de la Argentina con más de 3,000 partes por millón de azufre.

Es más, ENAP a través de su filial Sipetrol explora y explota crudo fuera de su país con actividades en Ecuador, Colombia, Argentina y África, asegurando la mayor producción de petróleo. Así, internamente la producción doméstica no supera los 8 mil barriles diarios y por medio de su filial incrementa su producción en unos 33 mil barriles diarios adicionales.

En verdad, resulta curiosa la coincidencia de la lideresa del Partido Popular Cristiano PPC con el ex Presidente García en su oposición al fortalecimiento y la integración vertical de PetroPerú, como lo hacen las empresas estatales exitosas de América Latina.

Un estadista nunca puede olvidar la historia pues esta tiene fines propedéuticos para no repetir los mismos errores. En tal sentido, coincidimos en la preocupación sobre los déficits que obtuvo la petrolera estatal en el pasado, sin embargo todo tiene su explicación, pues el negocio petrolero es la actividad más rentable en el mundo de allí el interés de la participación de los  Estados, pues también está relacionado con la seguridad energética. 

Si la preocupación se relaciona por las cuantiosas pérdidas generadas  por PetroPerú en el pasado, lo justo sería reconocer que ello correspondía a políticas de Estado, y al intervencionismo del gobierno de turno que fijaba los precios de los combustibles en el marco de un indiscriminado subsidio, es decir el ministerio de Economía y Finanzas fijaba los precios de los combustibles.

En especial todos debemos recordar los efectos nefastos del populismo económico de los años ochenta del siglo pasado, cuando a las empresas estatales se les obligó al subsidio indiscriminado a través de los precios subvaluados de las tarifas públicas, electricidad, telefonía, agua y combustibles, soslayando que todo subsidio tiene un costo, es decir “No hay lonche gratis”

Estas prácticas fueron particularmente nefastas en el caso de PetroPerú pues entre 1986 a 1990 fue obligada a vender un galón promedio de combustible a 22 centavos de dólar cuando el costo de producción estaba por los 52 centavos el galón, viéndose afectada por una descapitalización que no afectó el abastecimiento de combustibles en el país, a pesar de la debacle económica del modelo heterodoxo del primer gobierno del Dr. García Pérez. 

Por ello, si se aspira a la Presidencia de la República lo menos que puede hacer la lideresa del PPC es ilustrarse sobre el secreto del éxito de las políticas de hidrocarburos de Colombia, Brasil, y del mismo Chile que sin ser país petrolero exporta derivados de combustibles hacia nuestro país. 

El caso de Venezuela es ilustrativo sobre la teoría de la maldición de los recursos naturales pues con una producción de casi 2 millones de  barriles diarios, con precios del crudo que bordean los 100 dólares el barril y costos de producción de 6 dólares por barril, puede obtener fabulosos excedentes petrolizando su presupuesto y el conjunto de la economía; por ello se puede permitir políticas  de subsidio como mecanismos de distribución de ingresos.

Si bien el Perú está muy lejos de ser un país de la magnitud hidrocarburífera de Venezuela, la teoría económica y la historia aconsejan que no resulta un modelo sustentable ni deseable y será un problema que los venezolanos tendrán que resolver. Por ello, por la simpatía que irradia su posible candidatura de confluencia con sectores de izquierda modernizada, sería aconsejable una mayor ilustración sobre la dinámica de las petroleras estatales en el mundo y la necesidad del fortalecimiento de PetroPerú con operaciones integradas por razones de interés público.

ENAP DE CHILE Y SU GESTIÓN MODERNA EN EL SECTOR HIDROCARBUROS

Chile es un claro ejemplo de políticas de Estado respecto a la propiedad y gestión pública en la explotación de los recursos naturales no renovables.

La primera empresa productora de cobre a nivel mundial es la corporación de Cobre de Chile y en el sector de hidrocarburos opera con eficiencia la petrolera estatal ENAP con refinerías modernizadas que producen combustibles limpios en particular el diesel 2 con 50 partes por millón (50 pppm) de azufre.

A través de su filial Manu Perú Holding importa gasolinas y diesel 50 pppm, abasteciendo parte del mercado peruano como se puede apreciar en el siguiente cuadro.

Chile tiene una demanda interna de combustibles cercano a los 300 mil barriles día calendarios, mientras que la producción propia de ENAP a través de su filial Sipetrol con operaciones en Ecuador, Colombia, Argentina, África, entre otras, produce un equivalente de 33 mil barriles diarios. Por tanto su déficit en la balanza comercial es dramática, de allí que resulta vulnerable a los fuertes incrementos de precios internacionales de Petróleo; ello explica sus pérdidas netas en el 2011 y 2012.

Como importador neto las pérdidas serían mayores sin el control de la renta petrolera sobre la producción propia de ENAP y la gestión eficiente de sus refinerías

ENAP: Resultados e indicadores:

Ø  Desde la década de 1990, Enap y sus filiales han emprendido una vigorosa expansión productiva, con recursos propios y en asociación con otras compañías, nacionales e internacionales.
Ø  Sus principales socios en Exploración & Producción son: Repsol YPF (Argentina), PetroEcuador (Ecuador), Kuwait Energy Company (Kuwait), Petroshahd (Egipto), Wintershall (Alemania), Edison International (Italia), OMV (Austria), Enel (Italia) y Methanex (Canadá).
Ø  Sus principales socios en Refinación & Comercialización son: Foster Wheeler (EEUU), Ferrostaal (Alemania), Técnicas Reunidas (España), BG (Reino Unido), Endesa (España), Metrogas (Chile), Grupo Romero (Perú y Ecuador) y Aga (Chile).
Ø  Los ingresos anuales en el 2011 fueron de US$ 10,830 millones y en el 2012, fue de US$ 11,612 millones.
Ø  La producción de petróleo fue de 27,551 barriles días calendario (BDC) en el 2011 y; en el 2012, fue de 32,807 bdc.
Ø  La producción de gas natural fue de 7,091 miles de barriles petróleo equivalente (mbpe) en el 2011; y en el 2012, fue de 7,610 mbpe.
Ø  Las exportaciones de Chile al Perú, por gasolinas y diesel fue de 6,648 barriles día calendario en el 2011 y; en el 2012, fue de 7,250 bdc.
Ø  Las inversiones fueron de US$ 264.4 millones en el 2011  y US$ 225 en el 2012.
Ø  Es la 9na empresa petrolera con mayores ventas en América Latina al año 2011.
Ø  Es la 44va empresa con mayores ventas de América Latina al año 2011.
Ø  Es la 5ta empresa con mayores ventas en Chile al año 2011.
ØEn el Perú controla el 49% de las acciones de la más importante cadena de distribución de combustibles en los grifos y estaciones “Primax”, asociados al Grupo Romero.
ØEnap controla a Manu Perú Holding, que en sus operaciones en nuestro país realiza actividades de exportación e importación, habiéndose favorecido con el subsidio del Fondo de Estabilización de los Precios de los Combustibles (2006 / 2011)









martes, 23 de abril de 2013

IMPORTANCIA DE EMPRESAS PETROLERAS ESTATALES QUE TAMBIÉN OPERAN EN EL PERÚ


Desde el 2009 los nuevos accionistas del Lote Z-2B y otros lotes de exploración (Z-6, Z-33, Z-45, Z-XXVI, Z-35, Z-48, Z-36, Z-49, Z-51 Y Z-52) son empresas estatales de larga y reconocida trayectoria en el sector hidrocarburos a nivel mundial. KNOC y ECOPETROL definieron que, como parte de la expansión de sus inversiones en el mundo, Perú es un destino estratégico con un gran potencial.

¿Quién es la petrolera estatal de Corea del Sur, un tigre asiático que combina la intervención del Estado y el Mercado?

  • Korea National Oil Corporation tiene presencia en 24  países con más de 218 proyectos (en todos los continentes), con más de 30 años de experiencia a nivel mundial.
  • Produce más de 180,000 barriles de petróleo diarios y cuenta con más de 1,131 millones de barriles de reservas
  • Tiene más de 14 años de presencia en el Perú, con más de US$ 1,180 millones en inversiones en el Lote 8 (En Pluspetrol Norte es accionista minoritario) y en el Lote Z-2B y otros (tiene el 50%)
  • Ventas totales (Año 2011): US$ 8,172 millones
  • Puesto 71° en el  Ranking por Ventas de las Empresas Mundiales de Hidrocarburos.
  • Puesto 44° en el Ranking por Ventas de las Empresas de Corea del Sur (todas las actividades)
  • Puesto 5° en el Ranking por Ventas de las Empresas de Hidrocarburos en Corea del Sur.
  • Activos totales (Año 2011): US$ 3,297 millones
  • Patrimonio Neto (Año 2011): US$ 9,833 millones
  • Utilidad Operativa (Año 2011): US$ 899.6 millones

¿Quién es Ecopetrol?

  • Con más de 59 años de experiencia en la actividad de petróleo y gas en todos los continentes.
  • Es la 7ma empresa en ventas de América Latina al año 2011.
  • Es la 3era empresa con mayor utilidad neta en América Latina al año 2011.
  • Es la 9na empresa con mayores activos totales en América Latina al año 2011.
  • Es la 37ma empresa de hidrocarburos en el ranking mundial al año 2011.
  • Es la 1era empresa productora de petróleo en Colombia al año 2011.
  • Es la 1era empresa con mayor valor de mercado en América Latina al año 2011.
  • Utilidades Netas de US$ 8,360 millones al año 2011.
  • Cotiza en la bolsa de valores de Colombia, Perú, Nueva York y Toronto, con alrededor de 500,000 accionistas.
  • En el 2010, la producción de crudo fue de 277,462 BDC y; en el 2011, de 323,703 Barriles por día calendario BDC.

En conclusión en el Perú operan eficientemente y exitosamente en el sector de hidrocarburos varias empresas estatales como Ecopetrol de Colombia, KNOC de Corea del Sur, Petrobras del Brasil, Enap de Chile, Sonatrach de Argelia, Sapet y CNPC de China Popular, próximamente expondremos la importancia de las mismas a nivel mundial. Por tanto, sin ataduras ni fundamentalismos ideológicos se debiera fortalecer PetroPerú con la integración vertical, con producción de hidrocarburos y estaciones de servicios al margen de la participación en La Pampilla.








EL ESTADO DEBE APOSTAR POR PETROPERÚ*

Publicado en el diario: "La Primera" el sábado 20 de abril de 2013

Gina Carbajal

En el sector de Hidrocarburos y energético el Estado debe asumir un rol empresarial más activo, considerando que estos son sectores estratégicos para el país y, además, ofrecen grandes márgenes de rentabilidad, afirmó a LA PRIMERA el investigador de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Jorge Manco Zaconetti. Para el especialista, la participación empresarial de las empresas estatales realizadas con eficiencia, transparencia y sin intervencionismo, no afecta el modelo económico. Y considera que las críticas del sector empresarial son porque no quieren competencia y “temen que se potencie a un monstruo como PetroPerú”.

¿Qué significa que el Estado asuma un rol empresarial?
—El rol empresarial del Estado es parte de la modernidad de un país. Su presencia como empresa se justifica de acuerdo al sector donde se desempeñe y el carácter estratégico que tenga, además de la rentabilidad que genere. En el sector de Hidrocarburos es importante la participación del Estado, porque tiene un carácter de interés público y se relaciona con otros sectores. Sin energía no hay desarrollo. El Estado debe apostar por PetroPerú. 

— ¿Es contraproducente para la economía que el Estado asuma un rol empresarial?
—No es contraproducente. La empresa estatal tiene que manejarse de manera eficiente y competitiva. Su funcionamiento debe ser sin privilegios ni ataduras. El Estado al cumplir un rol empresarial genera nuevos ingresos, considerando que no son suficientes los conseguidos por el Impuesto a la Renta. El objetivo es que la empresa estatal, PetroPerú, funcione como cualquier empresa del mercado nacional. 

— ¿Por qué el sector empresarial y algunos agentes económicos ven con malos ojos o satanizan la participación empresarial del Estado? 
— Existe el temor de potenciar un monstruo como PetroPerú. El sector privado quiere mercados y en el sector Hidrocarburos todo es rentable. Se cuestiona la participación del Estado, porque en los años ochenta el gobierno del señor Alan García impuso un nuevo modelo. Obligó a un subsidio generalizado en el caso de los combustibles, eso significó que PetroPerú tuviera enormes pasivos. El costo del galón de combustible era de 51 centavos y fue obligado a venderse a 21 centavos, por cada venta de galón se estaba perdiendo 30 centavos, esas pérdidas se acumularon y genero pérdidas en la actividad económica del Estado. 


¿Por qué se sataniza el fortalecimiento y la mayor participación de empresas como PetroPerú en el mercado, pero no se dice nada de empresas estatales como Enap de Chile y otras empresas estatales foráneas que operan en el país? 
—Se habla de un monopolio estatal, eso no es cierto. La teoría económica dice que es más fácil intervenir en un monopolio público que un monopolio privado y es más fácil regular un monopolio público. Lo que debe determinar en una empresa estatal es la eficiencia, la competitividad y la rentabilidad. Si se compara la empresa estatal con otras empresas, PetroPerú solo en refinería tuvo una utilidad aproximadamente por 80 millones de soles, en cambio una empresa petrolera con tres pozos tiene 50 millones de soles en utilidad. La diferencia es inmensa. En el caso peruano, no somos un país petrolero, de cada tres barriles que se refinan, dos son importados. 

— ¿En qué sectores es idóneo o estratégico la participación del Estado?
—En el sector Hidrocarburos. Estratégicamente el Estado debe participar en la producción de petróleo, pero no arriesgarse en la exploración. Otro sector donde se debe cumplir el rol empresarial es en la generación de energía. 

El Estado debe tener una planta de generación térmica a gas en el sur del país, para garantizar la seguridad energética. El sector de transporte naviero de combustible también tiene que ser priorizado. El gobierno debe tener dos buques modernos con tecnología de punta de 50 mil toneladas que le sirva a PetroPerú. 

El sector financiero es otro campo estratégico. Ayudaría a regular la tasa de interés para que los préstamos no sean caros. El Banco de la Nación debe actuar como cualquier banco. 

— ¿Considera que el rol empresarial del Estado implica un cambio en el modelo económico?
—No hay que tener miedo. Si PetroPerú funciona con eficiencia, con transparencia, sin intervencionismo no va implicar un cambio en el modelo económico. Si se retornan los lotes petroleros se va producir al menos 35,000 barriles diarios.

—En el caso de la posible compra de los activos de Repsol, ¿PetroPerú establecería un monopolio en el mercado de Hidrocarburos? 
—PetroPerú no podría determinar el precio del petróleo ni de los derivados, porque el precio tiene referentes internacionales.

—En la explotación del Lote 64 (que Talisman cedió a la petrolera estatal), ¿PetroPerú debe aliarse con empresa privada? 
—El Estado tiene que tener visión de desarrollo nacional. El Estado debe apostar por la empresa petrolera, pero si no hay el capital, tiene que asociarse. Lo importante es que si hay reservas probadas, cualquier banco puede otorgar financiamiento. 

Pero lo aconsejable es asociarse con un socio potente que ponga tecnología y capital, sin que PetroPerú se descuide, es decir que no le coman con todo zapato. Así es el negocio del petróleo.

— ¿Son más los riesgos o beneficios para el Estados al asumir el rol empresarial?
—En la compra de La Pampilla, el hueso es la refinería y el lomo fino son los grifos. Quien compre La Pampilla, obligatoriamente tiene que hacer la inversión en la planta de sulfurización, con más de US$ 1,000 millones. El objetivo del Estado al 2016 es tener combustible limpio. Del 2005 al 2012, para abastecer el mercado de Lima y Callao se gastó US$ 7,000 millones en la importación de diesel con 50 partes por millón de azufre. Gran parte de las importaciones vienem de Chile. 



Empresas estatales que operan en Perú

Petrobras de Brasil. El 49% de las acciones de la empresa se cotizan en las principales bolsas del mundo. La empresa opera en el lote X con una producción cercana a los 13 mil barriles diarios, no solo abastece a la refinería Talara de PetroPerú, sino que con sus excedentes alcanzados ha financiado las actividades de explotación en diversos lotes, entre ellos el lote 58 ubicado en Camisea que tiene importantes reservas de Gas Natural. 

Ecopetrol de Colombia y KNOC de Corea del Sur. Las dos empresas estatales operan en el lote Z-2B en el zócalo continental desde el 2009, han sustituido a la empresa peruana Petro Tech. En este lote la producción es superior a los 12 mil barriles diarios de un crudo de alta calidad que abastece a la refinería de Talara. 

Enap de Chile. La empresa estatal ha logrado la integración vertical en el Perú y a través de una empresa subsidiaria, Manu Holdings, realiza actividades de exportación e importación, comprando en dicho país volúmenes de diesel y gasolinas. Otras empresas estatales en Perú son Sapet de China y Sonatrach de Argelia. 

http://www.diariolaprimeraperu.com/online/entrevista/el-estado-debe-apostar-por-petroper_136754.html


lunes, 15 de abril de 2013

EL FORTALECIMIENTO DE PETROPERÚ


LA INTEGRACIÓN CON LOTES, LA PAMPILLA Y GRIFOS
  
ESCRIBE: JORGE MANCO ZACONETTI (Investigador UNMSM)

Asumiendo como supuesto válido las inversiones proyectadas en la modernización integral de la refinería de Talara aumentando su capacidad de refino a 160 mil barriles diarios, las inversiones colaterales como la ampliación de las unidades de destilación al vació y craqueo catalítico, más la unidad de tratamiento de crudo pesados, planta de ácido sulfúrico  y sobre todo la unidad para reducir a 50 partes por millón el contenido de azufre en el diesel 2, más otras inversiones estimadas en su conjunto en más de 3,450 millones de dólares, sería recomendable la compra directa o en forma asociada por parte de PetroPerú del 51% de las acciones que tiene Repsol en la refinería La Pampilla, estaciones de servicios y planta de envasado de gas licuado de petróleo.

Este sería el más claro ejemplo de reconocimiento que fue un grave error económico, técnico y político la decisión de privatizar por partes las unidades que conformaban PetroPerú a inicios de la década de los noventa del siglo pasado. Esta  iniciativa se inició en 1992, con la transferencia al sector privado de lotes productores supuestamente marginales en los campos de Talara, con la privatización de filiales como grifos, Solgás, Petromar, Transoceánica, terminales etc.

Constituyendo la transferencia más significativa  la privatización de la refinería La Pampilla conjuntamente con los lotes 8/8X en la selva (Pluspetrol) y del lote X (Pérez Companc-Petrobras). Ha sido tan rentable el negocio y la renta petrolera obtenida en ambos lotes que permitieron el fortalecimiento empresarial de la  argentina Pluspetrol que de ser una empresa marginal en su país, pudo adquirir el lote 1-AB en el año 2000 y financiar más tarde su participación del 27.20 % en el Consorcio Camisea, alcanzando talla internacional.

Por ello, el fortalecimiento y modernización de PetroPerú presupone la integración vertical, con el control de las reservas probadas en los contratos próximos a su vencimiento en especial del Lote 1-AB ahora denominado lote 192, más los lotes de Talara y sobre todo con las reservas probadas del lote 64 (Talismán) transferido sin costo alguno recientemente a PetroPerú .

La integración vertical de PetroPerú, con lotes propios, las dos refinerías modernizadas, el oleoducto norperuano, terminales, la distribución mayorista y distribución minorista con grifos propios más la planta de envasado de gas licuado de petróleo (GLP) sería el renacimiento de la petrolera estatal, que tendría que ser sometida a un proceso de reestructuración empresarial, con una participación privada mediante la cotización de las acciones en la bolsa de valores siguiendo el modelo de Petrobras.

El éxito de la petrolera estatal brasileña que funciona en el mercado como empresa minimizando el intervencionismo político, al margen de la  voluntad política de su clase dirigente por su potenciamiento, es la participación del 49% de sus acciones que se cotizan en las principales bolsas del mundo, con una restricción contractual, ningún tenedor privado puede superar el 1% de participación accionaria, y el Estado por medio de la banca estatal y de fomento retiene el 51% de las acciones.

Se menciona el caso de Petrobras en el Perú por su posible retiro de sus operaciones ante la prioridad de sus inversiones millonarias en el Brasil, donde explotarían las reservas más importantes descubiertas en aguas profundas, reservas que convertirían a dicho país en una gran potencia hidrocarburífera. De allí, el interés de transferir o vender el lote X de Talara con importantes reservas probadas de petróleo y gas, y la participación en los lotes 58  (100%) y el 57 asociado con Repsol, ante el real desinterés de nuestro gobierno por desarrollar el gaseoducto sur andino.

Esta posibilidad de participación e integración de PetroPerú en los lotes cuyos contratos están próximos a su vencimiento, (Lotes II, III/IV, VI/VII, y 1-AB) más el lote 64 de la selva, y la participación en el lote X, haría posible el financiamiento integral de la refinería de Talara y la compra de las acciones de Repsol en la refinería de La Pampilla, estaciones de servicios y planta de envasado de GLP.

¿POR QUÉ IMPORTA LA PAMPILLA?

Desde sus orígenes con las refinerías de Talara con 65 mil barriles diarios de capacidad y La Pampilla con 105 mil barriles, antes de su privatización bajo responsabilidad de la petrolera estatal, existía una complementariedad entre ambas y una segmentación en el mercado de combustibles para satisfacer en calidad y oportunidad el mercado nacional, sobre todo en provincias donde necesariamente no resulta atractiva la inversión privada.

El mejor balance técnico refinero de Talara con una mayor capacidad de tratamiento de la unidad de craqueo catalítico, sumada a la calidad del crudo del noroeste le permite obtener una mayor proporción del diesel 2, más GLP y una menor producción de residuales en relación a su competencia.

Es más, en razón del “efecto sustitución” de Camisea, el gas natural utilizado en la generación eléctrica ha provocado una sobreabundancia de los petróleos industriales o residuales, que en buena parte son exportados por Repsol hacia Chile, donde la petrolera estatal ENAP los reprocesa convirtiéndolos en gasolinas de alto octanaje y diesel con 50 partes por millón de azufre gracias a la modernización de sus refinerías. Y parte de esa producción se exporta hacia al Perú sirviéndose de su filial Manu Holding de Combustibles. Es decir, la petrolera estatal chilena se ha integrado a nivel internacional, controlando el 49% de la principal cadena de distribución conjuntamente con el grupo Romero en la cadena “Primax” que también estaría interesada en la compra de la participación del 51% de Repsol.

La privatización de la refinería La Pampilla en 1996 por un lado y la transferencia del lote 8/8X a Pluspetrol, quebró la unidad y la integración que tenía la refinería con la producción del crudo de la selva norte, que disminuía en volúmenes y en calidad transitando hacia los crudos pesados. Esta disminución dramática de la producción de crudo en la selva nororiental (lotes 8 y 1-AB) ha determinado que más del 95% del crudo que procesa Repsol sea importado, principalmente petróleo del Ecuador, Colombia, y África.

Quién asuma las acciones de Repsol en La Pampilla igualmente tendrá que seguir importando petróleo y diesel con 50 partes por millón de azufre para abastecer el mercado de Lima y la macro región del sur, y realizar las inversiones ambientales que constituyen un mandato legal. Solamente las inversiones ambientales obligatorias en cada una de las dos refinerías tendrían un valor aproximado de 800 a 1,000 millones de dólares.

Esta es una de las razones principales por las cuales Repsol está ofreciendo el 51% de su participación en las acciones de la refinería La Pampilla más la cadena de grifos y la planta de envasado y distribución de Solgás que controla un 40% de la distribución del GLP.

Estas inversiones ambientales para retirar el azufre de los combustibles en especial del diesel 2 es de una lenta recuperación en cuanto inversión privada pues no se puede trasladar fácilmente al consumidor final. Por ello, se reconoce que tales inversiones constituyen “costos hundidos” que disminuyen el margen refinero.

Por el contrario, es responsabilidad del Estado en el marco del rol subsidiario hacer tales inversiones por la salud de los millones de peruanos promoviendo la producción eficiente  y el consumo de combustibles limpios, a partir de una producción propia por más mínima que sea, pero accediendo a la renta petrolera que asegura una rentabilidad que se incrementaría con el margen de refino y comercial proveniente de los grifos.

En esa lógica considero recomendable la compra de las acciones de Repsol en la refinería La Pampilla por parte del Estado teniendo como operador a PetroPerú, en especial por la cadena de distribución minorista y la planta de envasado y distribución del gas licuado de petróleo.

Los 400 o 500 millones de dólares que pudiera valer el 51% de las acciones de Repsol, más los 1,000 millones que sería el costo de la inversión ambiental y los pasivos corrientes de Repsol al 2012 por un valor de 407 millones y pasivos a largo plazo de 409 millones de dólares constituyen montos manejables para una regulación  moderna del mercado con una gestión eficiente y transparente de PetroPerú en el mercado de combustibles con una participación cercana al 90% en representación  del Estado, dejando abierta la posibilidad de las importaciones a cualquier operador privado.

Si se tiene presente que las importaciones del diesel 2 con 50 partes por millón de azufre efectuadas básicamente por PetroPerú y en menor cuantía por Repsol destinadas por ahora cubrir el mercado de Lima y Callao y parte de la macro región sur superaron desde el 2005 al 2012 más de 7,061 mil millones de dólares (Ver cuadro Importación de Diesel 2/ 50 PPM). Solamente en el 2012 dichas compras representaron la friolera de 1,280 millones de dólares. Por tanto, creemos que la modernización de ambas refinerías y la participación en La Pampilla por parte del Estado está más que justificada.

Los voceros empresariales de la derecha y sus acólitos expresarán que se trata de una propuesta estatista, violatoria del rol que establece el mandato constitucional, que comprometería millonarias inversiones que debieran ser usadas en la salud y educación. Aduciendo que PetroPerú se convertiría en un monopolio en el mercado de combustibles. Todos estos argumentos carecerían de fundamento con una efectiva regulación.

Por tanto, evaluando el significado de la privatización de las diversas unidades de PetroPerú, la rentabilidad real y potencial del negocio cuando se tiene una presencia integrada en las diversas fases de la actividad, más la presencia de importantes empresas petroleras estatales de otros países, demostrando el sentido estratégico que tiene la actividad de hidrocarburos, es que se debe apostar por el fortalecimiento de Petróleos del Perú S.A.A.