viernes, 22 de septiembre de 2017

Debate Modernización de la Refinería de Talara – Petroperú.

Carta aclaratoria del Ingeniero Humberto Campodónico Investigador de la Facultad de Economía de la U.N.M.S.M., dirigido a César Hildebrandt, Director del Semanario “Hildebrandt en sus Trece”.

Por su importancia económica y política éste portal publica la carta completa y comparte la necesidad de un debate técnico y nacional sobre la modernización de la refinería de Talara, el rol del Estado en el sector de hidrocarburos, la transparencia de la inversión pública y la lucha contra la corrupción.


Lima, 13 de setiembre 2017

Sr. César Hildebrandt
Director del semanario “Hildebrandt en sus trece”

Estimado César:

En el semanario de su dirección del pasado viernes 8 de setiembre, en el reportaje de Eloy Marchán titulado “Elefante banco” sobre la Refinería de Talara, se menciona en varias oportunidades hechos sucedidos durante el periodo en que estuve a cargo de la Presidencia del Directorio de Petroperú (agosto del 2011 a enero del 2013), a partir de declaraciones del Ingeniero César Gutiérrez.

Debo responder a esas declaraciones sobre lo sucedido en ese periodo, pues son hechos que responden a la época de la gestión del Directorio que me tocó presidir. Mis opiniones sobre otros temas que también son parte del reportaje las he publicado en otros medios, motivo por el cual no forman parte de esta carta.

En primer lugar, dice Gutiérrez que en la Memoria 2011 de Petroperú (durante mi gestión) se habla de “usar tecnología Flexicoking, que es la más cara del mundo y que solo la utiliza una empresa: Exxon. Haber escogido esa tecnología incrementa el precio en 400 millones de dólares”. Dice también el reportaje que cuando Gutiérrez “leyó esta Memoria sospechó que el costo del proyecto iba a incrementarse considerablemente”.

No es así. Fue la consultora Arthur D. Little (ADL) quien recomendó el uso de esa tecnología. Recordemos que Petroperú le encargó a ADL la elaboración de la ingeniería conceptual para la modernización de la Refinería de Talara, lo que ADL le entregó a Petroperú en junio del 2008, cuando Gutiérrez era aún Presidente de Petroperú.

Dice el informe de ADL, “Proyecto de Modernización de la Refinería de Talara”, en el acápite 5.1.2.1: “Se escogió el Flexicoker sobre otras tres tecnologías de procesamiento de residuos por dos razones. Puede eliminar la mayoría del residuo sin generar al mismo tiempo grandes cantidades de residuales o de coque. El Flexicoker también convierte la mayoría del coque de petróleo en Flexigas, un gas de bajo BTU que pueda ser usado como combustible en la refinería, minimizando o eliminando la necesidad de comprar gas natural”.

Además, en la Memoria 2009 de Petroperú se dice que el contrato para el Flexicoker fue firmado en enero del 2010 por Peter Hartmann, John MacFarlane y Simon Hacker, ejecutivos de Exxon Mobil Research and Engineering Company (EMRE) y por Luis Rebolledo Soberón y Miguel Celi Rivera, Presidente del Directorio y Gerente General de PETROPERÚ, respectivamente.

Queda claro que la tecnología Flexicoker, que permite ahorros importantes y mejora la calidad de los productos de la refinería, fue incorporada antes de nuestra gestión.

Segundo, dice Gutiérrez que en la misma Memoria del 2011 “se habla de ´ingeniería básica´, es decir, lo que estaba haciendo Técnicas Reunidas no era la modernización misma de la refinería”. Lo que aquí se insinúa es que se estaba haciendo algo distinto a lo que era nuestro mandato y que encarecería el precio de la refinería.

Vamos por partes. El contrato entre Petroperú y Técnicas Reunidas firmado durante el gobierno de Alan García en marzo del 2010 (después del contrato del flexicoker con EMRE) es un contrato denominado FEED-EPC (por sus siglas en inglés), en el cual se establece el alcance del proyecto y se realiza la Ingeniería Básica más la de ingeniería de detalle preliminar. El FEED (Front End Engineering Design) siempre viene después del Estudio de Ingeniería Conceptual (desarrollado por ADL en el 2008). Por tanto, el FEED es ingeniería básica. Se estaba haciendo lo que se acordó en el contrato del 2010.

Una vez terminado el FEED, se entrega al propietario (PETROPERU) una propuesta técnica y un monto de inversión del proyecto. Si el propietario acepta esa propuesta, entonces se puede pasar a la siguiente fase, denominada EPC (Ingeniería, Procura y Construcción).

Tercero, en el reportaje se dice que “a mediados del 2012 Técnicas Reunidas envió una carta a Petroperú proponiendo un nuevo contrato. El asunto se mantuvo en reserva hasta que el entonces Ministro de Energía Jorge Merino, en el CADE de ese año, no pudo aguantar el secreto. Dijo que la modernización de la Refinería había aumentado su costo a US$ 3,450 millones”. En este caso, el reportaje no menciona al Ingeniero Gutiérrez.

Debo decirlo claramente: no existe ninguna carta de Técnicas Reunidas proponiendo un nuevo contrato. En noviembre del 2012, Técnicas Reunidas envió su propuesta técnica a Petroperú, la misma que fijó un monto de inversión de US$ 2,634 millones en la refinería y US$ 784 millones para las llamadas “unidades auxiliares”, cuya inversión y financiamiento estaba a cargo de empresas privadas (una modalidad de APP) y no de Petroperú. Esa cifra fue la que Merino anunció en la CADE.

Cuarto, para verificar si el aumento del monto de inversión era o no consistente con el monto de US$ 1,334 millones (en dólares del 2006) del estudio de ingeniería conceptual de ADL del 2008, Petroperú contrató en el 2012 a la propia ADL para que haga la comparación respectiva. En el 2013, el nuevo Directorio de Petroperú le hizo el mismo encargo a la francesa Technip (ambos estudios están colgados en la página web de Petroperú https://www.petroperu.com.pe/pmrt/documentos/). Las dos empresas validaron la oferta técnica del FEED presentado por Técnicas Reunidas.

Así, ADL dice en su informe que “no estuvo involucrado en el proyecto durante el FEED pero que probablemente hubiera apoyado las decisiones clave sobre las unidades del proceso, si es que hubiera participado”. Añade que “apoya la inclusión de las unidades que son parte del FEED, así como sus dimensiones y su configuración”. Por ejemplo, dice ADL: “la decisión de reemplazar la Unidad de Craqueo Catalítico actual es un “upgrade” caro pero se justifica su reemplazo por una unidad nueva debido al análisis de la condición de la unidad, al impacto económico de tener que parar la unidad (durante el proceso de construcción), al aumento de la capacidad de la nueva unidad y a la necesidad de cumplir con los nuevos estándares ambientales”.

En resumen, en lo económico, el aumento del monto de inversión al 2012 se explica por varias razones, siendo las más importantes: a) el ajuste por inflación (de 2006 al 2012), b) las contingencias no consideradas inicialmente y c) otros servicios que no estaban considerados o que estaban subdimensionados en la ingeniería conceptual del 2008. Esto es muy importante: una cosa es la ingeniería conceptual (de escritorio) y otra es la ingeniería básica, donde se desarrollan los conceptos iniciales (algunos quedan, otros se amplían y/o se modifican) y también se hace un estimado de los precios de los equipos y tuberías, así como de los costos de la construcción civil. Cabe destacar que el estimado del monto total de de inversión de ADL en el 2012 fue mayor en 2.6% respecto a la propuesta presentada por Técnicas Reunidas.

Por tanto, el Directorio que me tocó presidir actuó siempre de forma transparente, con pleno respeto a los compromisos asumidos. Es por ello que respondo de manera directa sobre todas las dudas y señalamientos que pudiera haber sobre nuestra gestión. Dejo también constancia que no me pronuncio aquí (lo he hecho en otros medios) sobre los otros temas señalados en el reportaje (posteriores a mi gestión), que considero que son la expresión de la absoluta necesidad de una prensa independiente y fiscalizadora, sobre todo en este clima de corrupción que estamos viviendo y que debe ser combatida a fondo.

Finalmente, así como lo propuse en diciembre del 2012, considero indispensable que Petroperú llame a una conferencia pública en la cual se expongan todos los planteamientos técnicos, económicos y financieros del Proyecto Talara. En esta conferencia, que podría realizarse en el Colegio de Ingenieros del Perú, deberían participar todos (me incluyo también) los analistas y críticos del proyecto, los colegios profesionales, las universidades y la sociedad civil en su conjunto.  De esa manera se podrán analizar a fondo todos y cada uno de los planteamientos del proyecto (incluyendo algunos muy especializados).

Atentamente,
Ing. Humberto Campodónico
DNI 06750288 

viernes, 1 de septiembre de 2017

PROMIGAS: UNA CUESTIONABLE POSICIÓN DE DOMINIO

Las Comercializadoras Versus Las Distribuidoras de Gas

ESCRIBE: JORGE MANCO ZACONETTI


Debo cuestionar la masificación del gas natural a partir de las concesiones en la distribución que suponen la práctica de principios basados en la exclusividad y el privilegio, caso Contugás (Ica), Gas Natural Fenosa (Arequipa, Moquegua y Tacna), Gases del Pacífico (Chimbote, Trujillo, Pacasmayo, Chiclayo, Cajamarca), y Gases del Norte, los cuales afectan a empresas privadas que apostaron a su cuenta y riesgo desde tiempo atrás, invirtiendo y generando empleo en la comercialización de gas natural comprimido (GNC) y gas natural licuado (GNL) para las empresas industriales y grifos, las cuales serían desplazadas faltando a los principios de libre competencia.

Es el caso de las empresas Gascop en Piura, Neogás, Clean Energy, Energigas, Indox, Cryo Energy, EGP, empresas medianas que apostaron por la cultura del gas, invirtiendo capitales conseguidos con mucho sacrificio en las provincias del sur y norte del país, y que hoy se verían perjudicadas por el propio estado para favorecer a dos empresas que en un cuestionado proceso ganaron los derechos para ejercer la concesión en la distribución de gas natural, Fenosa de España en el sur (Arequipa) y Promigas de Colombia a través de su filial Gases del Pacífico.

Es más, Promigas con el nombre de la empresa Gases del Norte estaría en la espera del Ministerio de Energía y Minas de obtener la autorización en la concesión en la distribución de gas natural en Piura.

En el departamento piurano castigado por el Fenómeno del Niño, se cuenta con importantes reservas de gas natural que no encuentran mercado, existe una grave diferencia entre la empresas de hidrocarburos Olympic que opera el lote XIII y la empresa de generación Enel Generación antes Eléctrica de Piura S.A. contra la empresa Gases del Norte, filial de la colombiana Promigás, proceso que retarda la resolución final que autorice la concesión de distribución de gas natural.

Es más, al no tener como clientes de la red de distribución a la planta de generación eléctrica (Malacas) propiedad de la transnacional italiana Enel Distribución Piura y a la Refinería de Talara de PetroPerú, que representan más del 75 por ciento de la demanda en la distribución de gas natural, prácticamente la tarifa residencial para las 64 mil familias piuranas se haría inviable costando más de 17 soles mensuales, sin contar con los intereses del financiamiento, cuando se prometió una tarifa de S/ 12 soles mensuales.

Si a ello se agrega la oposición de importantes sectores sociales en Piura y Talara, e industriales a la concesión en la distribución de gas natural a favor de la colombiana Promigas, con variados  argumentos, más la presencia de un nuevo actor como la empresa Gastalsa que tendría derechos sobre la concesión para la distribución en el distrito de Pariñas cuya área de influencia incorporaría la Refinería de Talara, hace de este proceso un proceso viciado y cuestionado, que debe servir para replantear las denominadas “concesiones a petición de parte”

SETIEMBRE NEGRO

Menciono esta realidad, pues el gas natural tratado en la Planta de Melchorita activo del Consorcio Perú LNG, donde el gas se somete a un proceso de enfriamiento, es decir el hidrocarburo se convierte a líquido para poder ser transportado en los camiones cisterna, para luego ser regasificado en las provincias del sur y norte donde se distribuirá en los grifos, redes domiciliarias e empresas industriales que constituyen la “pera en dulce”.

En realidad, el suministro de gas natural en cualquiera de sus formas a las industrias de provincias, es el origen del conflicto entre las empresas comercializadoras y las empresas de distribución de gas natural. Aquí existe una controversia que debe resolver de la mejor manera fomentando los principios del libre mercado, concertación y seguridad energética, evitando los abusos de una posición de dominio.

Desde setiembre del presente año, la empresa colombiana Gases del Pacífico filial de Promigas abastecerá a las ciudades del norte como  Chimbote, Pacasmayo, Trujillo, Chiclayo y Cajamarca que serán beneficiados con el gas de Camisea que será transportado a través de una flota de camiones cisternas desde Pampa Melchorita (Cañete), ubicado al sur de Lima. De otro lado la española Gas Natural Fenosa hará lo mismo en Arequipa, Moquegua y Tacna.

En verdad, las empresas comercializadoras Gascop, Neogás, Clean Energy, Energigas, Indox, Cryo Energy, EGP, que desde hace más de siete años han apostado por el abastecimiento de gas natural en la forma de gas natural comprimido y gas natural licuado, con bastante éxito demostrando la rentabilidad en el suministro a empresas industriales y pesqueras además de grifos en distintos departamentos, serían desplazadas del mercado de comercialización.

Sí, ahora el propio estado a través del Ministerio de Energía y Minas castigaría el éxito de estas empresas imponiendo sobrecostos en el peaje de la concesión de distribución de gas natural, donde prácticamente los desaloja del negocio para favorecer los intereses de las dos empresas concesionarias: Fenosa y Promigás

Así, se pretende que paguen un peaje de casi US $ 4 dólares por millón de BTU unidad de calor por usar la red de distribución. Si se tiene presente  que aproximadamente el 50 por ciento del millón de BTU resulta equivalente a un balón de gas licuado de petróleo de 10 kilos como unidad de calor, es evidente el sobrecosto, más aun cuando el precio del gas natural del lote 88  en boca de pozo tiene un precio regulado de US $ 1.80 por millón de BTU para el uso industrial. Es decir, por peaje pagarían más del doble del precio del gas natural en boca de pozo ¡Que tal abuso se haría contra las comercializadoras!

En la práctica la imposición y obligatoriedad de este peaje para las empresas comercializadoras las desplazaría del mercado, peor aún si se pretende que tal norma tenga una vigencia de 12 años tal como lo establece el proyecto de Resolución Ministerial 185-2017-EM, que debe ser corregido por la nueva responsable del sector Cayetana Aljovín.

INDESEABLE POSICIÓN DE DOMINIO

En verdad la presencia de capitales colombianas debiera ser bienvenida como toda inversión que demanda con seriedad el país. Así, el Grupo de Energía de Bogotá a través de su filial EEGAS S.A.S. es accionista de Promigas S.A. ESP y a su vez detenta el 40 por ciento de participación en la empresa de transmisión eléctrica Red de Energía del Perú, y el 75 por ciento en Contugas S.A.C. (Ver Gráfica)

Contugas S.A.C. es la empresa responsable de la distribución de gas natural en el departamento de Ica con el gas de Camisea, la misma que tiene una grave controversia con las empresas de generación eléctrica estatales Egasa y Egesur, y con la empresa Aceros Arequipa, por los altos costos tarifarios en la distribución de gas natural.

El Grupo de Energía de Bogotá también controla el 40 por ciento de la empresa de transmisión eléctrica Consorcio Transmantaro S.A. y la “pera en dulce” es la presencia de la colombiana Promigas que controla el 40 por ciento de la empresa de distribución de gas natural proveniente del lote 88 del mercado más importante del país: CALIDDA,  responsable del suministro de Gas Natural de Lima y Callao.

Promigas S.A. ESP tiene como principal accionista a la Corporación Financiera Colombiana S.A. que detenta el 34.22 por ciento del capital y el Grupo de Energía de Colombia el 15.64 por ciento. Ver Gráfica

Por último, Promigas S.A. de Colombia controla el 100 por ciento de las filiales Gases del Pacífico S.A.C responsable de la distribución de gas natural en Chimbote, Trujillo, Pacasmayo, Chiclayo y Cajamarca, y el 100 por ciento de Gases del Norte S.A.C. que estaría esperando la autorización para la distribución de gas natural en Piura.

Esto constituye una perversa posición de dominio de Promigas que resulta ajena a los principios de la “libre competencia” pues supone privilegios, exclusividades, altos costos tarifarios en la distribución que serán difícilmente regulados por el Osinergmin, afectando a demás  a una serie de empresas comercializadoras de gas natural comprimido y gas natural licuado que apostaron en el pasado por la cultura del gas.

En verdad, esta es una muestra palmaria que no tenemos política energética, y que las grandes empresas del Consorcio Camisea, Perú LNG, Repsol, Promigas, las transnacionales eléctricas imponen los principios de la competencia a favor de sus intereses, en desmedro de los medianos capitales, empresas y del consumidor final.