viernes, 25 de agosto de 2017

¿QUIÉNES SON LOS DUEÑOS DEL PERÚ?

LOS GRUPOS DE PODER ECONÓMICO Y POLÍTICO

ESCRIBE: JORGE MANCO ZACONETTI

Con los resultados preliminares al primer semestre del 2017 respecto a los ingresos y utilidades de las primeras dieciocho empresas que listan en la Bolsa de Valores de Lima, se expresa un alto grado de concentración que caracteriza a la economía peruana. En especial, se presentan a las principales empresas que operan en nuestro país bajo principios ajenos a la “libre competencia”, el mismo que solamente existe en los textos de economía.

Lamentablemente en la formación académica de los economistas constituye una ausencia grave la omisión sobre el estudio y análisis de los Grupos de Poder Económico, su estructura y su dinámica, pues sus decisiones de inversión tienen una importancia fundamental en la dinámica y política económica. ¿Por qué cae la inversión privada, si siguen obteniendo importantes utilidades? Esta es una cuestión de primer orden. En otras palabras, recordando a Carlos Malpica Santisteban: ¿Quiénes son los Dueños del Perú?

En tal sentido, debemos reconocer los aportes de una serie de investigadores que desde las difíciles condiciones para la investigación independiente, han contribuido a descubrir las relaciones entre los grupos de poder económico y sus vinculaciones con el poder político, los partidos y los intelectuales, y claro está con la prensa concentrada.

Por ello, debemos reconocer la contribución pionera de Jorge Bravo Bresani, quien en los años sesenta del siglo pasado inauguró los estudios sobre los grupos de poder, inspirando a una serie de investigadores que en los últimos cincuenta años han desarrollado el tema. Después de todo el ensayo “Gran Empresa Pequeña Nación” (IEP) se lee con deleite teórico, y constituye un clásico de la historia económica.

En esa línea de investigación, debemos agradecer la contribución de Malpica, Anaya, Alcorta, Silva, Torres Cuzcano, y sobre todo de Francisco Durand cuyas investigaciones han profundizado el tema en especial sobre los orígenes del Grupo Romero y los últimos 12 Apóstoles.

¿QUIÉN ES QUIÉN?

El Ranking de Mayores Ingresos entre las Empresas que cotizan en la Bolsa de Valores de Lima, nos trae sorpresas dignas de un mayor análisis que superan las condiciones de un artículo periodístico.

Lo primero que debemos destacar es el desplazamiento de Petróleos del Perú S.A. (PetroPerú) como la empresa líder en la generación de ingresos en la economía peruana. Esta tendencia de afirmarse refleja la postergación que experimenta la petrolera estatal, pues en los últimos años está limitada a las actividades de refinación y distribución mayorista de combustibles.

Con la información correspondiente la petrolera estatal ocupa el segundo lugar en el ranking con ingresos de 6,200 millones de soles mejorando su performance en relación al 2016, pero con una utilidad neta raquítica 373 millones de soles, lo que determina una tasa de rentabilidad neta del 6 por ciento. Es decir, PetroPerú descontando los costos de venta, gastos de venta y administrativos, más los gastos financieros de cada 100 soles de ingresos tiene una utilidad neta de 6 soles.

Desde 1993 PetroPerú sometida a un irracional proceso de privatización de sus unidades y activos, sin lotes de producción propia, sin la Refinería La Pampilla, que según el cuadro estaría ocupando el tercer lugar en cuanto a ingresos generados..

PetroPerú como empresa sometida a una serie de contratos lesivos que ninguna empresa privada aceptaría, como el contrato de despacho y administración de los terminales que beneficia a la cuestionada empresa Graña y Montero S.A., que dicho sea de paso se hizo grande en el sector gracias al descuartizamiento de la petrolera estatal.

Hoy Graña y Montero S.A. la misma empresa cuestionada y socia de la corrupta brasileña Odebrecht, detenta los lotes I, V,  III y IV más los terminales de PetroPerú haciendo pingues negocios gracias a la privatización.

Es más, en el nefasto gobierno pasado, los lotes III y IV le fueron enajenados a PetroPerú para favorecer al capital privado en nombre de la “libre competencia”. Ello debería motivar al Congreso de República a una prolija investigación pues existiría evidencia de favoritismo y colusión con el último directorio humalista de PetroPerú en afectación del interés público.

Sin la empresa envasadora de gas licuado Solgás, que fue vendida a vil precio en 1992, sin grifos propios, sin terminales, sin participación alguna en los grandes negociados del gas de Camisea, la petrolera estatal pese a todas las adversidades, es todavía rentable, pero más rentable sería si fuera una empresa integrada es decir, con producción de petróleo y gas propia.

De allí la importancia del lote192 (antes 1-AB) para PetroPerú cuyas reservas probadas de petróleo adquieren mayor valor en la medida que podrían ser tratadas en la moderna Refinería de Talara a partir del 2022, pues ésta tendrá una unidad especial, la única en el país que podrá refinar crudo pesados que son los más abundantes en la selva nororiental.

En segundo término, al primer semestre del 2017 la Refinería La Pampilla SAA controlada por la transnacional española Repsol ha generado ingresos del orden de los 5,414 millones de soles, ocupando el tercer lugar en el listado, lo cual dice bastante sobre la importancia  estratégica de los derivados del petróleo, como el diésel y gasolinas en la economía peruana.

La refinería La Pampilla al primer semestre del 2017 ha declarado una utilidad neta de US $ 28 millones de dólares que al cambio en soles se convierten en 93 millones de soles. Esto significa una tasa miserable de rentabilidad neta de apenas el 1.71 por ciento. Es decir, descontando los costos de venta, gastos de venta y administrativos, más los gastos financieros de cada 100 soles de ingresos la refinería privada declara una utilidad neta de 1.71 soles.

Mientras PetroPerú declara una rentabilidad neta del 6 por ciento la Refinería La Pampilla genera una rentabilidad del 1.7%, es decir la estatal es más de tres veces rentable que la privada, a pesar de la prédica liberal y privatizadora. 

De allí la importancia de apostar por el fortalecimiento y modernización de PetroPerú desde el punto de vista de la acumulación interna, pues las utilidades de la petrolera estatal se quedan en el país, las de la competencia “fugan” mediante una serie de mecanismos.

Ello debiera servir para cuestionar el mito interesado de los liberales criollos que denigran el rol del Estado en el sector de hidrocarburos, así sean rentables pues pregonan y demandan la privatización de PetroPerú, a pesar que la evidencia comparativa demuestra que la petrolera estatal es superior en ingresos, márgenes operativos, netos y aporte tributario desde 1997 a la fecha en relación a la Refinería La Pampilla.

¿QUIÉN PARTE LA TORTA?

El cuadro en referencia que solamente muestra a las dieciocho primeras empresas en cuanto a la generación de ingresos al primer semestre del 2017 expone una cuestión central: La importancia del Grupo Romero en la economía y política peruana. Como conglomerado económico participa en una serie de sectores económicos incluido el de los hidrocarburos a través de la cadena de grifos Primax.

Como un pulpo económico financiero en el listado aparece en un primer lugar en cuanto a la generación de ingresos con la empresa financiera Credicorp Ltd con 6,397 millones de soles, desplazando a las empresas de hidrocarburos y mineras.

Es más, si sumamos los ingresos como Grupo Romero que involucra a Credicorp Ltd, más el Banco de Crédito del Perú SA, más Alicorp SAA empresa ligada al rubro de alimentos y servicios varios y por último considerando Rímac Seguros y Reaseguros prácticamente los ingresos agregados superan los 13,634 millones de soles en la muestra. ¡Prácticamente el pastel de la economía peruana lo corta el Grupo Romero en nombre de la libre competencia!.

En relación a la participación de las empresas mineras, al primer semestre del 2017 un honroso cuarto lugar lo ocupa la Mra. Cerro Verde con ingresos del orden de 4,485 millones de soles superando los 3,516 millones de soles del primer semestre del 2016, lo cual resultaría un indicador de la mejoría de los precios del cobre y de los mayores volúmenes exportados.

En el mismo sentido, la Southern Perú Copper Corp. que opera los yacimientos de Cuajone y Toquepala cuyos concentrados son refinados en la Fundición de Ilo también expresa una mejoría en cuanto a sus ingresos. Así, se ubica en el séptimo lugar con ingresos del orden de los 3,396 millones de soles superando los ingresos del primer semestre del 2016 que sumaron los 2,873 millones de soles.

De la muestra de las primeras dieciocho empresas cuatro están constituidas por entidades bancarias, ocupando el Banco de Crédito el puesto 6º, el BBVA Continental ubicándose en el puesto 9º, seguido por el Interbank que ocupa el puesto 12º para terminar con el Scotiabank que retiene el puesto 13º.

A pesar de las dificultades económicas y la declarada recesión los bancos no tienen pierde, pues la mayoría de los bancos incrementan sus ingresos en el primer semestre del 2017 en relación al período anterior. Ello tiene una razón explicativa gracias a los perversos diferenciales entre las bajas tasas de interés pasivas (depósitos de ahorro) y las altas tasas activas de interés que cobran los bancos por los préstamos bancarios, que pueden superar el 40 por ciento anual, lo cual refleja el alto nivel de concentración financiera.

También debemos identificar el bajón que ha tenido Telefónica del Perú en cuanto a los ingresos al primer semestre 2017/2016, pues ha pasado de un honroso tercer lugar en el 2016 con 4,629 millones de soles a un quinto lugar en el 2017 con ingresos del orden de 4,205 millones, lo cual estaría demostrando la feroz competencia por captar más clientes con otras empresas del sector telefónico Claro, Bitel, etc.

Por último, debemos destacar el lugar que ocupan las dos empresas de distribución eléctrica que son responsables del suministro en la ciudad capital. Tanto Luz del Sur que se ubica en el puesto 15º y Enel Distribución antes Edelnor en el puesto 17º obtienen importantes ingresos y utilidades a pesar del menor crecimiento de la economía peruana.

En verdad, la entrada más fructífera para el análisis económico y político es el reconocimiento de la importancia y los altos niveles de concentración de la producción y de la propiedad que tienen los Grupos de Poder (Romero, Brescia, Rodríguez Banda, etc.) articulados a las grandes transnacionales que operan en los diversos sectores de la economía peruana, pues ellos son los Dueños del Perú.




viernes, 11 de agosto de 2017

OSINERGMIN: SIN BRÚJULA NI REGULACIÓN

ABUSOS AL CONSUMIDOR REGULADO

ESCRIBE: JORGE MANCO ZACONETTI

La tarifa eléctrica en nuestro país tiene tres componentes que reflejan a los distintos actores empresariales que interactúan en el sector. Por un lado, la parte de generación que constituye la más importante de la tarifa representando un poco más del 52 % del costo, donde compiten una serie de empresas por despachar primero en el sistema; éste componente en los últimos años se ha caracterizado por una creciente sobreoferta en la capacidad de producción de energía, la misma que ha sido inducida por la generosidad de las políticas del sector, es decir del estado, asegurando una rentabilidad sin mayores riesgos en la reserva fría, energía no convencional, nodo energético del sur, etc., con subsidios varios, que en última instancia los asume el consumidor final, que somos los casi ocho millones de clientes regulados.

Lo curioso es que las tarifas eléctricas en lugar de bajar se incrementan en razón de las distorsiones que caracterizan al sector eléctrico, tal vez el sector más rentable de la economía peruana, después de las ganancias en el sector minero, a pesar del carácter de servicio público, y constituir un negocio ligado al mercado interno.

Por ello, si el PBI aumenta la demanda eléctrica y por tanto la producción se incrementa por lo menos 2 puntos porcentuales por encima de la tasa de crecimiento del PBI. Por tanto, cuando se crecía en promedio a tasas del 6 % del PBI, la demanda de electricidad se disparaba por delante. En cambio, si crecemos a menos del 3 % la demanda amengua y qué pasa con aquellas empresas que invirtieron en demasía en la generación con más unidades de potencia instalada, esperanzados en el destrabe de los megaproyectos mineros.

Según los datos oficiales esta capacidad de oferta de energía bordea el 50 % y se ha convertido en un problema económico para las empresas de generación que pueden ser hidráulicas si utilizan la fuerza de las aguas para generar energía, o de generación térmica si utilizan el gas natural para quemarlo como combustible, así también pueden consumir los derivados del petróleo como el diésel y petróleo residual.

Los otros componentes de la tarifa están constituidos por los costos de transmisión como por los costos de distribución, que configuran “monopolios naturales”, pues no es posible fomentar la competencia. Si usted vive en Lima Norte o Lima Sur por ejemplo, el suministro para un cliente regulado, una vivienda familiar es otorgado por Edelnor, que ahora se denomina Enel Distribución Perú, y Luz del Sur del grupo Sempra, que a pesar de las importantes utilidades operativas obtenidas están racionalizando personal, es decir, invitando al retiro a los trabajadores más antiguos, para contratar fuerza de trabajo a costos menores.

Sea como fuere, los diversos voceros del sector señalan que la situación eléctrica es difícil en la presente coyuntura pues estarían ganando menos, por la fuerte competencia entre los generadores por abastecer en mejores términos a los clientes libres, sobre todo a las empresas que pueden negociar las tarifas eléctricas directamente con un generador y/o distribuidor eléctrico, el que le ofrezca la menor tarifa.

Es más, con los últimos cambios en la legislación sectorial en el mercado de corto plazo o “mercado spot” que antes era privilegio solamente de las empresas de generación representados por el cartel del COES-SINAC (Comité de Operación Económica del Sistema Interconectado Nacional), ahora podrían intervenir los grandes usuarios, es decir las grandes empresas para comprar directamente su electricidad, atraídos por los bajos precios de la electricidad en dicho mercado.

Tratando de ser comprendido por usted amable lector, según la normatividad del sector eléctrico en nuestro país existen tres mercados. El mercado regulado de baja tensión al cual pertenecemos los usuarios residenciales y de pequeño comercio. Luego está el mercado libre, conformado por menos de 400 empresas que compran directamente su energía a través de contratos de largo plazo, con las empresas de generación o distribuidoras. Por último, está el mercado de corto plazo, donde compran y venden electricidad las empresas de generación y no más de cinco grandes usuarios en la práctica, sobre todo mineras, que pueden negociar hasta el 10% de sus requerimientos de electricidad en el mercado “spot”.

Lo curioso es que a pesar de las múltiples quejas por la sobreoferta de capacidad de producción, las empresas siguen percibiendo grandes utilidades operativas y netas, las cuales serían mayores si se suman los montos que se deducen por concepto de depreciaciones y amortizaciones que se cargan a los costos de ventas pero que constituyen parte del flujo de caja, es decir forman parte del excedente económico.

Una distorsión que expresa la rentabilidad extraordinaria está en relación a los costos por megavatio hora (Mw/h) que tiene que pagar el usuario regulado que bordea los US$ 65 dólares el megavatio, mientras los clientes libres, es decir las grandes empresas pueden comprar su energía a precios menores a los US $ 30 dólares el Mw/h, incluso en el pasado reciente llegó a un costo de US $ 22 dólares el megavatio hora.

El problema para las empresas de generación que compiten en el mercado de corto plazo, el denominado mercado “spot”, es que gracias a la sobreoferta de capacidad de producción el precio de la energía, que se expresa por el costo marginal, ha venido disminuyendo dramáticamente en los últimos meses.  Como es un mercado altamente especulativo y todos quieren su tajada de la torta, compiten en una guerra de precios. Así el costo marginal que estaba a US $ 20 dólares por megavatio hora (Mw/h) ahora bordea casi la mitad para disgusto y preocupación de las empresas generadoras.

Así, esta realidad que debiera favorecer al cliente regulado por la propia naturaleza del negocio solamente privilegia a los clientes libres, es decir a las empresas que pueden abonar o pactar sus precios de energía a una tercera parte del precio pagado por los clientes regulados. ¿Dónde está el Osinergmin para ajustar las tarifas reguladas hacia abajo, si el diferencial con las tarifas de los clientes libres es mayor al 10%?

UTILIDADES OPERATIVAS SUBEN POR ASCENSOR

En el cuadro “Las Principales Empresas Eléctricas con Mayores Utilidades Operativas” 2011-2016 en miles de soles, lo cual significa que debemos agregar tres ceros a las cifras para evitar malentendidos.

 Con la información correspondiente hemos seleccionado a las principales empresas que operan en la actividad de generación, transmisión y distribución eléctrica, donde casi todas obtienen mayores utilidades operativas, que representa la utilidad como negocio en marcha, rentabilidad que sería mayor si se le suman los montos correspondientes a las depreciaciones y amortizaciones (Utilidad operativa más depreciaciones más amortizaciones es igual a la Generación Interna de Recursos GIR) que resulta ser el mejor indicador de la rentabilidad empresarial.

Como resulta evidente las primeras cuatros empresas en tener las mayores utilidades operativas, descontando a los ingresos los costos de venta, y los gastos de venta y gastos de administración, resultan estar representadas por Enersur ahora Engie Energía Perú, la estatal Electroperú, Edegel ahora denominada Enel Generación y Kallpa Generación del grupo Israel Corporation.

En el caso de Enersur del grupo Suez Energy las utilidades operativas en el período 2011 al 2016 pasan de ser 373 millones para ubicarse en 900 millones de soles, pese a la sobreoferta de capacidad de producción. Se puede decir que las utilidades de dicha empresa ascienden como la espuma de las cervezas.

La estatal ElectroPerú solamente por abrir y cerrar las compuertas de las centrales de Antúnez de Mayolo y Restitución en el río Mantaro en la región de  Huancavelica, obtiene crecientes utilidades operativas en el período que van desde los 372 millones de nuevos soles en el 2011 para llegar a los 518 millones en el 2016.

En el caso de Enel Generación antes Edegel y Kallpa tienen utilidades operativas importantes gracias a los precios regulados del gas natural de Camisea proveniente del lote 88. El gas barato de Camisea les permite a Enersur, Enel Generación y Kallpa obtener utilidades extraordinarias, pues el negocio es comprar gas barato para sus turbinas y venden energía cara al sistema, e incluso ganan relativamente más vendiendo a los clientes libres y a las empresas de distribución mediante subastas de energía.

Como se expresa en el cuadro a pesar del denominado momento crítico de las empresas eléctricas producto de la sobreoferta de capacidad de producción, menor crecimiento del PBI, subsidios tarifarios, las utilidades operativas de las empresas de generación, transmisión y distribución se incrementan a pesar de todo gracias a las distorsiones y abusos al consumidor a vista y paciencia del Osinergmin, supuestamente organismo regulador.